11 de febrero 2013
Ignacio González ha confirmado este fin de semana la futura construcción del casino
en Alcorcón, proyecto que unos nos venden como ventajoso y que otros aseguran que traerá más corrupción y precariedad.
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| Protesta contra Eurovegas el pasado 8 de febrero. Lainformacion.com |
¿Qué es Eurovegas
y cómo nos lo han vendido? Esta misma mañana, en el telediario de Telemadrid se
esmeraban en mostrarnos su cara más amable: un puñado de parados llenos de
ilusión haciendo cola para dejar su currículo con la esperanza puesta en los “miles
de nuevos empleos” que aseguran que se crearán. Los “periodistas” de La
Razón proclaman, entusiasmados, que tres de cada cuatro madrileños está
seguro de que generará empleo (apoyándose en unos datos cuya autenticidad los
propios lectores cuestionan, si observáis). Lo que es cierto es que el inmenso
proyecto, que Ignacio González ha
afirmado este fin de semana que tendrá lugar, definitivamente, en la localidad
de Alcorcón, ha comenzado ya a mostrarse a través de sus primeras
infografías: hoteles de lujo, avenidas, enormes complejos. Todo huele a
derroche, a grandeza, a despliegue de medios y no se puede decir la palabra
“proyecto” sin poner delante el prefijo “macro”. Las Vegas españolas, que lo
llaman.
En Facebook, Eurovegas
cuenta con una página
de apoyo con más de dos mil seguidores y, si ojeamos, los usuarios dicen cosas
como “¡bienvenido trabajo!” y postean proclamas esperanzadas de que el casino traerá
empleo “primero de construcción”. Los croupiers
se relamen, los parados piensan en su gran oportunidad y he oído a algunos
anticatalanistas jactarse considerando la elección de Madrid para su
construcción como un gancho en los morros independentistas, dado que Barcelona
fue la otra opción. Todos hablan de “una inyección económica para Madrid”. Que
va a haber puestos “de camareros, vigilantes, limpiadores, aparcacoches”. Que
los catalanes “vendrán luego pidiendo trabajo”. Etc.
Todos estos feisbukeros
deben haber escuchado a Borja Sarasola, consejero
de Medio Ambiente de la
Comunidad de Madrid, repartir datos con ceño fruncido
acerca de lo que Eurovegas va a significar para los madrileños de a pie: nada
menos que 90.000 puestos de trabajos directos,
50.000 indirectos y una inversión de 16.000 millones de euros a nuestra
comunidad. Pero, ¿qué hay realmente dentro de este casino-milagro, de la
caja de Pandora de los dados y las tragaperras?
Voces discordantes: de “isla fiscal” a
“pelotazo urbanístico”
Algo
debe haber detrás de un plan que tiene en contra no sólo a gran parte de la
ciudadanía sino, también, a ecologistas, políticos, arquitectos (que cuestionan su
legalidad) o la propia Iglesia (que hace lo mismo con su moralidad).
La plataforma
Eurovegas No parece que tiene más ventanas a la información aparte
de Telemadrid. Así, lleva desde el mismo día del anuncio de su construcción
manifestando su desacuerdo en base a un buen número de razones. Habla de los graves
impactos que conlleva un plan de estas características en la economía, la
sociedad y el entorno madrileño. Se oponen a que el magnate Sheldon Adelson
esté exento de pagar todos los
impuestos, mientras a los ciudadanos se les sube el IVA y se les recorta
derechos sociales. Denuncia que la ciudadanía no haya sido consultada para
decidir sobre la creación de este complejo, aprovechando también para advertir
de daños medioambientales irreversibles
en el territorio.
Otra de sus razones para oponerse a Eurovegas es el
“marco legislativo” que el Gobierno le ha hecho a medida, obedeciendo a las
exigencias de Las Vegas Sands Corporation (por ejemplo, modificando la ley
antitabaco o eliminando el límite de altura de los rascacielos para beneficiar
a sus empresarios): según la plataforma, Alcorcón contará con “su propia isla fiscal, laboral, económica y
medioambiental, un “estado de excepción” tutelado por los intereses económicos
de una empresa transnacional”. Por decirlo de otra forma, aseguran que el
megaproyecto creará “una “ciudad de excepción legal” donde blanquear dinero y defraudar sin tener que moverse a otro país”.
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| Viñeta de "El Roto". |
Hay, por otro
lado, quien lo considera un “nuevo
pelotazo urbanístico”. La portavoz Equo Madrid, Inés
Sabanés, ha dicho que este proyecto significa dar continuidad a los mismos excesos que han generado la crisis y
ha añadido, en la línea de las críticas anteriores, que Eurovegas "favorece
el blanqueo de capitales" y una inversión de los bancos
españoles que hoy están rescatados.
Desde luego, el plan
financiero es dudoso y, al parecer, 2/3 de su coste lo pondrán los bancos
españoles. Juantxo López
de Uralde, de EQUO, dice en su artículo:
Aquí surge la
primera duda ¿se trata de bancos rescatados con dinero público? Y entonces uno
se pregunta si todo el esfuerzo realizado con un enorme sacrificio social de
los españoles para sacarlos del agujero se va a saldar invirtiendo el dinero en
esos casinos. O si serán bancos no rescatados, y entonces la duda es ¿cómo es
posible que no haya crédito para la pequeña empresa, para el emprendedor, para
el negocio local… y lo haya para esta macrofiesta del juego y del ladrillo?
La conclusión no puede ser
más triste: no hemos aprendido nada. O mejor dicho: los que nos gobiernan no
han aprendido nada. Quieren meternos otra vez a todos en la senda del ladrillo
y la especulación que nos trajo al pozo en el que estamos hundidos.
Voces más
minoritarias señalan, como otro problema a añadir a la lista y a plantearse, el
impacto que tendrá para el millón y
medio de afectados por la ludopatía que hay en España la construcción de un
macrocasino de estas características.
¿Habrá empleo?
Así pues, sólo nos
queda el argumento de los puestos de trabajo como el último al que agarrarse para
defender el macroproyecto. Sin embargo, la plataforma Eurovegas No llega
a dudar sobre las cifras que
el Gobierno de Madrid ha dado sobre la creación de empleo, debido a que no ha
aportado ninguna explicación a las mismas. Se plantea, además, qué garantías ofrecen estos supuestos empleos, que
supone serán precarios. Los recelos son normales si volvemos la vista a la “gran
madre”: hoy en día la ciudad de Las Vegas no es solamente el estado
norteamericano con mayor tasa de criminalidad y desahucios… sino también con
mayor desempleo. Qué paradoja.
En ATTAC, para
quien Eurovegas es “otra multinacional subvencionada”, consideran que el resultado de construcciones
como ésta es la “total libertad
para el capital y precarización social y régimen de esclavitud para la clase
trabajadora, o lo que es lo mismo, disponer de nuestras vidas para
beneficiar a una élite que se reparte los cada vez más escasos recursos, en
lugar de apostar por un modelo más
racional, humano y solidario”.
Movilizaciones para detener el proyecto
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| Cartel de la plataforma Eurovegas No. |
Raúl Román En Eurovegas se respetará
escrupulosamente la ley española #salvoalgunacosa
Carlos Valladolid
Adelson tenía dos opciones: hacer su complejo en Alcorcón y llamarlo Eurovegas
o hacerlo al lado, en Villaviciosa y ahorrarse buscar nombre.
Arezno Eurovegas
saltándose las leyes, políticos y empresarios manejando dinero negro, está
claro que generamos confianza, pero entre las mafias.
Revista Mongolia
Ignacio González anuncia que se podrá fumar en Eurovegas,
que a ellos a arrastrarse ante multimillonarios no los gana nadie.
José Luis Obrador
La salida de la crisis está en Alcorcón. Y la de los licenciados, en Barajas.
De momento, incluso
aunque el proyecto ha pasado de estar en el aire a poner los pies en la tierra,
cada vez va quedando más en evidencia que las promesas son sólo humo. La
plataforma dice que intensificará sus protestas. Lo importante es que cada vez
haya más gente que se informe y no se quede en la deslumbrante fachada de este
gran engaño.
Artículo de Diana Moreno
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